Bueno, terminó la primera semana.
Da igual el tiempo que lleves en la enseñanza que, siempre al comenzar el curso, sientes ese cosquilleo ante algo nuevo. Porque cada año trae cosas nuevas: nuevo cole, o nuevos compañeros o nuevos niños y a veces, como me ocurre a mí ahora, todo, todo, es nuevo. Con apenas unos días para reuniones, elegir curso, preparar la clase, realizar la mudanza (las maestras de infantil nos movemos con grandes cantidades de material que vamos recogiendo año tras año), empezamos sin entender muy bien como alguien desde un despacho puede desestimar el periodo de adaptación para que la entrada al cole de los más pequeños no resulte traumática. No es fácil "encerrarte" (sí, digo encerrarte porque algunas veces solo puedes echar la llave para que no echen a correr por los pasillos buscando a mamá) con 25 niños que, aunque hayan ido anteriormente a la guardería no te han visto en la vida y eres para ellos una auténtica desconocida, durante 5 largas horas.
Los primeros días poco puedes hacer aparte de sacar todos los juguetes posibles para que dejen de llorar, mientras atiendes a los que reclaman que quieren hacer pipí, caca, vomitar o irse con mamá. No cuentes con sacarlos al recreo porque se sienten más inseguros y lloraran más.
Los que no lloraron el primer día probablemente lo harán el segundo o el tercero visto el panorama anterior.
Pronto estará aquí el lunes y la situación habrá mejorado un poco pero aún queda mucho por hacer, aquí os dejo algunas cositas que he probado y van funcionando:
- No te angusties si lloran. mantén la calma. El que llora con pena será fácil de calmar si lo abrazas o lo mimas. El que llora con rabia y da golpes y patadas, necesita desahogarse, déjale llorar vigilando que no se haga daño.
- Aprovecha los momentos de tranquilidad para intentar que se sienten y vayan escuchando. Recuerda que no debes gritar para captar su atención.
- El ir estableciendo rutinas les dará seguridad. Planteate una nueva para cada día. Es menos complicado de lo que parece.
- No renuncies a que sean ellos los que recojan la clase, para ello piensa bien que juegos y juguetes vas a poner a su alcance. Son capaces de ordenar muñecos, coches, cacharritos de cocina incluso las piezas de las construcciones si vigilas un poco. De momento nos olvidamos de puzzles, encajables, pinchitos...
- Además de juego libre ve introduciendo actividades dirigidas. La duración de éstas últimas dependerá del interés que despierten en tus niños. Poco a poco descubrirás las que más les gustan.
- Háblales sin gritar y poniéndole a todo un toque de misterio. Un "¿a que no sabéis que tengo aquí? puede ser un buen comienzo para colocar el cartel del calendario, o el de la asistencia o cualquier otro que vayamos a usar. Podremos inciar con ellos las primeras conversaciones. Es el momento de fijar normas: Levantar la mano para hablar, hablar de uno en uno, no gritar... (el otro día el ponerle una pila a un reloj de pared nos dío para un buen rato. Aproveché para ver que saben de formas y colores).
- La música es un recurso indispensable: puedes empezar a incluir unos minutos de música para relajarse, más de uno se dormirá pero les suele sentar muy bien a todos,
- Las canciones que incluyen gestos, saltos y palmadas les encantan. Casi todos los métodos incluyen en su CD algunas de estas canciones y son muy populares las de "Cantajuegos".
- Por último, recomendaros las canciones cantadas por vosotr@s mismo-as. Algunos de los momentos más desesperados los he superado cantando. No intentes cantar por encima del ruido ni de sus llantos: recuerda que tu voz es tu herramienta más preciada. Poco a poco irán dejando de llorar y captarás su atención. Para ello, además de no gritar debes escoger canciones con un ritmo monótono y repetitivo (recuerda el efecto de las nanas para calmar y dormir niños). Además deben ser cortas (te pedirán que las repitas una y otra vez) y pueden tener una minihistoria o algún detalle familiar.
El pollito LU
Estando el pollito Lu
comiendo comiendo arroz,
el arroz estaba calientey el pollito se quemó.
La culpa la tienes tú,
la culpa la tengo yo,
por no comer con cuchara,
con cuchillo y tenedor.
Chimpón.
Buenos días (con la música de frérè jacques)
Buenos días,
buenos días, para tí,para mí.
Estamos contentos,
estamos contentos
de estar aquí,
de estar aquí.
Los patitos
Los patitos,
en el agua,
meneando su colita,uno a otro,
se decían:
¡Ay que agua tan fresquita!.
Todos los patitos se fueron a nadar,
y el más chiquitito se quedó atrás,
su madre enfadada le quiso pegar,
¡y el pobre patito se puso a llorar!
¡ua! ¡ua!
No llores patito le dijo su mamá
que muchos besitos yo te voy a dar:
¡mua! ¡mua! ¡mua!.
El pato y la pata
El pato y la pata tuvieron un patito
(muy chiquitito, muy chiquitito).
Un día el patito se fue a caminar,
andando andando llegó a la ciudad.
¿Sabéis lo que vió en aquella ciudad?
coches y coches que corrían sin parar.
¡Qué casas más altas, qué miedo me da,
me voy a casita con papá y mamá!.
Y esta es la historia del pato Cua-cua
que andando, andando
llegó a la ciudad. 
la araña pequeñita
subió, subió, subió.
Vino la lluvia y se la llevó.
El sol brilló
y la lluvia se secó.
La araña pequeñita
subió, subió, subió .
Encontrarás muchas más letras de canciones en http://boj.pntic.mec.es/~jverdugo/canciones.htm
